Hoy 19 de junio de 2011, Pinky hizo la transición a otro Plano, dejó su cuerpo físico como suele suceder. Pinky fue aquí en la tierra un Perrito Doberman Miniatura que fue adquirido para ser regalado a nuestra señora Madre, en su cumpleaños. Pinky es hermano de Cerebro, ambos, junto con mío, sufrieron una infección viral, que acaba con las funciones vitales en 48 horas, en ese lapso de tiempo, se salva el 80% de las veces un perro ante tales infecciones. Pinky formó parte del 20% de las estadísticas, ante la deficiencia de inmunoglobulina A, no pudo resistir el ataque. Tu cuerpo físico, yace ahora nutriendo las raíces de un Árbol de Mamón.
Pinky, el tiempo que estuvo en este plano me brindó alegría, amor, entretenimiento, cariño, ternura, travesuras que me hicieron molestar y travesuras que me hicieron reír, y, en esta cosa sin sentido que algunos le llaman vida, se termina el ciclo, también me brindaste dolor, tristeza y desconsuelo, yo sólo te di abrigo y comida y medicinas, algo tuvo que haber faltado para completar la sanación, imagino que no fue suficiente mi energía y la de mis hermanos y Madre, o, tal vez, tu misión se cumplió. El tiempo y la sabiduría que pudiera adquirir y agradecería a la providencia por ello me supliera, para poder entender qué es lo que falta para salvarla vida de alguien a quien amas!
Es por ello que, Pinky, como le he dicho a Bob, y no pude decirle a Benji: “Lucha hasta el último aliento hermano, pero si tienes que irte, vuela! Y sé libre!
Yo me encargaré de cumplir con esta condena de seguir viviendo y, cuando llegue ese momento de abandonar este cuerpo físico y hacer la transición a otro Plano, será donde se encuentre el Eliseo de las mascotas y seré la mascota de todas aquellas que formen parte de mi línea de existencia!
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